viernes, 31 de agosto de 2007

Premio Blog Solidario


El BlogDay 2007 ha sido para mi un gran día. He tenido la fortuna de ser mencionado en tres bitácoras, como uno de los blogs recomendados para un paseo virtual: Kabila, Palimpsesto y El Sol de la Nit. Pero, además, haber sido premiado como uno de los Blog Solidario otorgado por tres bloggeros españoles que ya lo poseen, quizá con mayor mérito que EL LADO OSCURO DE LA TIERRA que recién despega.

Soy sincero en afirmar que me he sentido halagado. Nunca imaginé que en tan poco tiempo que llevo en la blogósfera iba a calar en los corazones y en las mentes de quienes me leen. Y por supuesto, debo agradecer muy de veras a estos amigos que me distinguen con este premio. ¡Muchas Gracias amigo Alberto! Tus letras explicatorias del porqué este honor hacia mi bitácora, lo reproduzco textualmente tal como lo expresaste en tus REFLEXIONES PROGRESISTAS: "No es fortuito que el suyo sea el primer nombre que se me viene a la cabeza. Por muchísimos motivos, no es casualidad que al oir la bella palabra "Solidaridad" piense en esta bitácora y sobre todo en la gran persona que la dirige. Humberto, con su preocupación social, su conciencia igualitaria y su ideología justiciera se ciñe a la perfección a estos parámetros benditos de la solidaridad. Sobrados son los motivos que así lo determinan: su preocupación por las poblaciones indígenas de sudamérica, sus reflexiones en pos de los sectores más desfavorecidos de este maltratado continente y su ideal de ver y vivir en una Latino América libre y soberana, justa y popular... sin duda merecen este reconocimiento. A pesar de su breve periplo por la blogsfera, que apenas supera el mes y medio, ya ha dado suficientes destellos como para iluminar un poco el "lado oscuro de la tierra". Y sobre todo, para iluminar nuestra ceguera a este lado del charco, concienciándonos, acercándonos las lacerantes desigualdades y dificultades que han de sufrir sus conciudadanos. Por todo ello y con mi más sentido reconocimiento personal y bloguístico entrego este premio a mi amigo Humberto".

También tengo que agradecer a mi amiga Arianna, conductora del blog EL SOL DE LA NIT, quien en un gesto muy lindo hace honor a mi blog otorgándole el mencionado premio. Por último, al amigo Manuel que firma como CSA (Comunista, Socialista, Anarquista) del blog EL MUNDO ROJO por su designación con este galardón.

Post Data: Estoy obligado por los parámetros reglísticos a elegir a siete blogs susceptibles de ser honrados con este premio. Sin embargo, voy a tomarme algun tiempo para hacer una buena elección. Si por alguna razón me demorase por cualquier motivo no piensen queridos amigos que voy a quebrantar las reglas.

jueves, 30 de agosto de 2007

Mis cinco blogs recomendados en el "Blog Day"

Blog Day 2007

Desde hace algunos días veía la propaganda del Blog Day en la Internet pero no le daba mayor importancia. Creía que era un evento de los bloggers que ya se conocen entre sí y que de una manera prototípica estrechan lazos para seguir promocionando sus respectivos blogs. Y, por supuesto, me parecía la cosa más justa y necesaria y hasta cierto punto, imprescindible.

Así han venido pasando los días hasta que me llegó el mensaje del amigo Rafa -conductor del blog Kabila- quien me señalaba que mi blog era uno de sus nominados para el susodicho "Día del Blog". ¿Como? ¿Mi Blog? No niego que al principio me dio mucha alegría pero luego una tremenda desazón por no saber en que consiste y cual es el espíritu que anima esta celebración. Recién, en ese momento, caí en la cuenta de que yo también formo parte de la blogósfera y que el hecho de tener mes y medio de "vida" en este mundo virtual, no me eximía de participar en la celebracion mundial del bloggero. De inmediato me puse a buscar información a través de Google y ya con la información a cuestas me he puesto a definir cuales son mis cinco blogs recomendados -cosa que se me ha hecho difícil por la cantidad de blogs que recomendaría- pero, como las reglas son las reglas, no me ha quedado más remedio que dejar muchos blogs afuera y proponer solo a los cinco blogs que de inmediato paso a reseñar:

http://reflexionesprogresistas.blogspot.com/

REFLEXIONES PROGRESISTAS: Este blog es conducido por un joven español que recién ha cumplido sus 17 años. Su temática está orientada a las reflexiones ideológicas y políticas desde una posición principista y militante. Llama poderosamente la atención que los temas sean abordados con una profundidad propia de un intelectual académico y/o político maduro forjado en mil debates teóricos y doctrinarios. Su línea de reflexión no solo está orientada a los problemas nacionales de España sino del mundo entero. Particularmente sigue de cerca el acontecer latinoamericano y por ello hemos tenido muchas horas de intercambio de ideas que está plasmada en un reportaje sobre la Realidad Socio-Política de América Latina. Tengo, asimismo, la suerte de contar con su amistad, razón más que suficiente para recomendarlo con todo el afecto que me es posible.

http://astridstocker.blogspot.com/

VIDAVIDEO: blog chileno conducido por la pintora Astrid Stocker. Es uno de los cuatro blogs que conduce (los otros tres son: "Kaos Luz Creación", "Astrid Stocker Oleos", "9 Imox, Imix, Cipactli...") que mas me ha impresionado por la fuerza de sus emociones con que expresa su mundo interno. Confieso que hay partes de su blog que me remiten a las vivencias "vallejianas", esas que siempre están presentes en la vida de todo ser humano cuando se esta ad portas de lo inevitable. Es un blog que no dejará indiferente a nadie que lo visite. Eso lo tengo por seguro.

http://arbillas.blogspot.com/

ARBILLAS: blog de misceláneas conducido por una española muy solidaria y que por lo mismo ostenta un premio (Premio Blog Solidario) concedido por su manifiesta sensibilidad para con los problemas sociales del mundo entero. Fue una de las primeras en enviar -por intermedio de mi blog- su solidaridad con todo el pueblo peruano a raíz de la catástrofe que dejó el sismo del 15 de agosto del año en curso. Recomiendo efusivamente este blog porque es un deleite para los ojos y también porque nos invita a una reflexión sobre lo que sucede mas allá de nuestro entorno habitual.

http://arte-leny.blogspot.com/


EM@IL URBANO: Es un blog de misceláneas donde se encuentran notas sobre el arte contemporáneo, la historia, el cine, la musica, literatura, etc. Es conducida por la portorriqueña Leny quien invita a todos los que lo visitan se den un paseo virtual por los portales de sus instituciones culturales de Puerto Rico. Además de ello, también está presta a socorrer a cualquier blogger que recién se inicia en el mundo de la blogósfera, sobre todo en los aspectos técnico del diseño y configuración del blog.

http://pensamientoprogresista.blogspot.com/

EL MUNDO ROJO: Como su mismo nombre lo sugiere, este portal está dedicado a la difusión de las ideas socialistas. Es conducido por un blogger español cuyas reflexiones ideopolíticas trascienden las fronteras de su país. Me considero cercano a su concepción ideológica y filosófica del mundo actual y por eso no puedo dejar de recomendarlo a quienes quieran sumergirse en los temas propios de la izquierda progresista.

Espero que esta selección sea de vuestro agrado. Sé que mucho ha influído las cuestiones subjetivas del suscrito, sin embargo, creo que ninguno de los recomedados defraudará a quien lo visite. De antemano muy agradecido por la deferencia que le presten al presente post. Muchas Gracias. Y ¡Feliz día a todos los bloggeros del mundo!





domingo, 26 de agosto de 2007

El odio de Dios

"Dios mío, si tú hubieras sido hombre,
hoy supieras ser Dios;
pero tú, que estuviste siempre bien,
no sientes nada de tu creación,
Y el hombre sí te sufre: el Dios es él!"

(César Vallejo: Los dados eternos)

Indagando en el copioso alud de noticias y reportajes sobre el catastrófico sismo que azotó el sur chico del Perú, me encuentro con este valioso testimonio del periodista Beto Ortiz (diario Perú 21) que -desde una óptica emotiva y bajo el sugerente título: "El odio de Dios"- nos cuenta sus experiencias extraídas desde el mismo centro de la tragedia. Veamóslo:

Colapsó. La famosa imperturbabilidad, el supuesto estoicismo, los nervios de acero que los periodistas nos pavoneamos siempre de tener, la blindada resistencia ante el horror ajeno -con este sismo- colapsaron también. No he visto, en 20 años de coberturas, ni la cuarta parte de lo que debe haber visto, qué se yo, Kapuscisnki, Pérez Reverte, Zileri, Thorndike, Guerrero sin ir más lejos. He visto sí -por haber alcanzado a reportear en los aciagos días del terrorismo- bastantes más muertos que un cirujano promedio y entiendo a la perfección los sollozos con los que, al teléfono, suplicaba un cachorro fotógrafo a sus editores -desde Pisco- que tuvieran piedad de él y lo sacaran de esa maldita pesadilla.

Así como los limeños menores de 30 no tenían -hasta la semana pasada- la más pálida idea de qué diablos eran los terremotos, los aguerridos periodistas de esa misma generación tampoco tenían forma de saber, en sangre propia, qué se siente pararse en una plaza de armas a sacarle fotos a formaciones enteras de cadáveres hinchados mientras, de repente, alguien reconoce una medallita o un vestido floreado en medio de la horrenda putridez y entonces aúlla y gime y se echa a correr absurdamente como un pobre perro al que un camión acabara de pasarle por encima. ¿Qué es lo que los manuales de periodismo aconsejan en esos casos? ¿Qué hay que hacer con el micrófono inalámbrico?, ¿es mejor una toma fija en plano medio o un paneo no muy lento?, ¿transmitir en vivo o diferido?, ¿qué tipo de lente nos conviene usar? ¿Cuál ha de ser la primera pregunta -éticamente correcta- que hay que formularle a una joven mujer cuyo hijo de dos años acaba de morir con la cabeza destrozada por un trozo de pared que le cayó encima desde un cuarto piso? Díganme ustedes. Ilústrenme. Transmitan ustedes el drama humano sin solazarse en la desgracia. Exhiban mesura, ponderación, buen gusto, misericordia. Tres, dos, uno, grabando. A ver, pues, ensayen alguna pregunta respetuosa.

El niño existió y se llamó Adriano Núñez Sánchez (2). Su madre, Victoria Elizabeth (28), maestra de escuela, Elisa para los amigos, sus padres ancianos sobreviven con ella en la misma choza indigna enclavada en mitad de la polvareda, tiene otro niño de siete que vio a su hermanito morir delante de él pero eso a ustedes -que no tienen cómo saber ni qué cara tenía- les dice muy poco o, de repente, nada. A Elisa la entrevisté el domingo pasado en San Clemente, esa misérrima comunidad a la entrada de Pisco donde el nivel de vida puede perfectamente competir con el del África subsahariana . No fui en busca de su testimonio pues no tenía noticia alguna de su caso, fue ella la que, al ver que llegábamos con una cámara de TV, corrió -como muchos- a nuestro encuentro, desesperada, como si estuviera convencida de que algo podríamos hacer para atenuar el infierno que crepitaba en su interior. Como si supiera que, tarde o temprano, lo habríamos de escribir y como si aquel fuera el único modo de dejar constancia de que su bebito existió, la última esperanza de que esa vida no quedara en el olvido. Parece que cuando ya lo has perdido absolutamente todo, lo único que te queda (y que nadie te puede quitar) es tu derecho de contarlo. Pero para un reportero es imposible administrar tamaño superávit de relatos. Cada nuevo damnificado tiene siempre algo aún más terrible qué declarar que el anterior. Es como si todos se hubieran sentado sobre los escombros de sus casas a esperar, día tras día, que llegue cualquier N.N. con tripas y corazón suficientes para escucharlos: venga a filmar cómo ha quedado mi casa, señor, trepe ese muro y tómele foto a los cerros de donaciones que nadie reparte, diga en su canal que a los niños que se salvaron, nos los está matando el frío, señor, así diga. Es como si los sobrevivientes del cataclismo deambularan doblados por el peso de ese relato ominoso que aún no han tenido chance de contar.

No tuve necesidad de preguntarle nada. Elisa había comenzado a desmenuzar su dolor desde mucho antes de que la cámara la enfocara siquiera. En virtud de algún extraño tipo de deformación profesional o de mecanismo de defensa que mi organismo debe haber desarrollado, siempre tiendo a pensar automáticamente en otra cosa cuando me tocan este tipo de historias. Mientras escucho los extenuantes detalles de cómo expiró el finado en cuestión trato de acordarme, por ejemplo, de qué cosas urgentes tengo que hacer mañana a primera hora: pagar la renta, llevar la ropa a la lavandería, acompañar a mi viejo a su cita con el neurólogo. Debo creer que -si me zambullo en cada tragedia- corro severo riesgo de volverme loco. Si ya hay un aparato encendido que lo está grabando todo, no veo la necesidad de grabármelo yo también. Pero las inconsolables lágrimas de Elisa pudieron más que todas mis mañas de coleguita periodiquero: me obligaron a escucharla completamente, a impregnarme de su infortunio hasta los huesos: «¿Qué hago yo aquí sentada llorando y llorando a mi hijo si sé que ya nadie me lo va a devolver?,¿ si nadie me va a ayudar?,¿ si sé que estoy sola en el mundo y así sola como estoy, me voy a tener que levantar porque si yo me derrumbo del todo, qué va a ser de mis padres, de mi otro hijo?¿Acaso no se van a derrumbar también?». Me pasó con ella algo que no me pasaba hacía ya bastante tiempo con un entrevistado. Me pasó lo mismo que a Mabel Huertas de Día D frente a aquel recién nacido crucificado en un hospital de Ica por las atroces poleas de tracción con las que los médicos intentaban salvar sus piernecitas partidas en sabe Dios cuántos pedazos por el peso del adobe. Lo mismo que a un camarógrafo amigo que terminó por quebrarse como un niño al comprobar que, la silla de ruedas desechada por un pariente suyo, era heredada ahora por Anita, una pequeña de cinco o seis años que -con síndrome de Down, con las piernas lisiadas, sin zapatos- daba de roncos gruñidos como un animalito enfurecido.

Aun a sabiendas de que semejante arranque no nos hacía buenos ni malos ni regulares ni le servía tampoco a nadie para componer nada, terminamos la grabación dejando en las manos de Elisa una chanchita, el contenido íntegro de nuestras más bien esbeltas billeteras: doscientos soles, la misma cantidad (prestada) que le había costado enterrar a su bebé en un rústico cajoncito de madera. ¿Cristiano complejo de culpa, vocación frustrada, súbita caridad? Pónganle ustedes el nombre que quieran. Cuatro días después regresé a San Clemente y la busqué en la misma covachita al borde de la autopista. Tras corta espera, ella asomó entre las exhaustas esteras, toda soñolienta, aún cubierta por una gruesa capa de polvo ceniciento. Evadiendo el sarcasmo de algún faltoso miembro de mi team que susurraba impertinencias, («¡Tranquilo, Ferrando!»), puse en sus manos la enorme carpa Mountain Gear que, en improvisada subasta, algún televidente le canjeó el miércoles a Gianmarco por su último disco autografiado. Al recibirla, Elisa sonrió de modo casi imperceptible y, por un segundo, pareció transfigurarse. Ya sin la mueca del espanto dibujada en los labios, la encontré distinta: más serena, más fuerte aún e incluso un poco bonita. «Nada te obliga a adoptar a todos tus entrevistados» me dijo, alguna vez, cachosamente, el director del diario en el que pagaba piso como practicante. Se burlaba, claro, de mi clásico idealismo adolescente de reporterito amateur que siente que su carrera ha fracasado si no logra conseguirle muletas a todos los poliemielíticos del mundo, válvula de Pudens a todos los hidrocefálicos, donante de médula a todos los leucémicos.

Después, claro, a fuego lento, te vas cociendo, vas macerando, te vas curtiendo y -con un poco de experiencia y otro poco de suerte, supongo- te vas acostumbrando, vas creciendo, vas madurando y madurando hasta que un día maduras tanto que ya absolutamente todo termina por llegarte al huevo. Pero no hay que olvidarse nunca lo que la vieja canción de Los Prisioneros nos enseñó: un poquito de amor puede cambiar al mundo, muchachos. Aunque de repente no, de repente exageran porque al mundo, seamos realistas, no lo cambia nadie. Ni siquiera ese Dios que -en opinión de Vallejo- nunca supo ser Dios porque nunca fue hombre y estuvo siempre bien, ese que parece que, en el fondo, nos odiara porque nos manda, ya ustedes saben, las zanjas oscuras, los bárbaros atilas y la resaca de todo lo sufrido que se empoza en el alma, yo no sé. Por alguna misteriosa razón, mientras, a merced de la paraca que esparce el polvo de los muertos por doquier, recorría las ruinas de lo que en vida fue el antiguo puerto de Pisco con una máscara de doctor y una conjuntivitis galopante, me acordaba muy poco del genio pisqueño Valdelomar y su infancia dulce, serena, triste y sola y sí mucho, en cambio, del apocalíptico Vallejo. Probablemente porque tras haber homenajeado mis raíces catecúmenas voluntariando apenas un poquito en estos días, tratando, con las justas, de cerciorarme de que la ayuda de unos pocos llegue a los muchísimos a los que tiene que llegar, me he convencido del todo de que, en esta porción malherida del mapa, la catástrofe no data del 15 de agosto, para nada. No nos engañemos. La verdadera desgracia es anterior al terremoto y a sus 7.9 en la escala de no sé qué. No hablo de todo Ica, ni siquiera de todo Pisco. Hablo, con las justas, del hambriento San Clemente. El viernes que acaba de pasar, en las cuatro o cinco horas que duró el reparto de las generosas donaciones de mis amigos del programa, debe haber desfilado frente a mis ojos toda la miseria inconmensurable del Perú. Más pobreza, peor pobreza de la que he visto nunca en todo el resto de mi vida de periodista peruano. Miseria 7.9. Este terremoto ha sido, en realidad, la brutal erupción de un volcán de miseria que, en este país, se rebalsa por los cuatro costados. Y ha sido viéndola, lo confieso hidalgamente, que he llorado. No sé si de impotencia o de vergüenza o de una mezcla de las dos. Constatándola me he hecho a mí mismo un sencillo pero significativo juramento. Me he jurado no volver a tolerar delante de mis cámaras, el sufrimiento. Me he jurado usarlas, por todo el tiempo que me reste, para levantar a gente del suelo y nunca más para derribarla. Para mejorar un poquito este país y no para terminar de hundirlo. Tal mi humilde plegaria de reportero. Siéntase libres de persignarse conmigo los que estén de acuerdo. El viernes que acaba de pasar he visto mujeres con el lomo arqueado acarreando ollas comunes con un brazo y con el otro, cargando niños que, probablemente, ya habrán caído víctimas de la bronconeumonía cuando ustedes lean esto. He visto viejecitos parados sobre sus huesos rotos, haciendo colas de cuadras y cuadras, de horas y horas con tal de recibir una pinche botella de agua, una conserva de pescado, una colcha usada, un puñadito de menestra. He visto niños que, aún aterrorizados por el paso del monstruo desconocido, estallan en llanto apenas intentas preguntarles algo, lloran en ese llanto ronco y sin lágrimas tan característico de los hambrientos, de los desnutridos, de los deshidratados que ya no tienen ni con qué llorar: niños plomizos y famélicos que estiran sus manos para recibir un chancay, lo devoran en segundos, lo desaparecen, se lamen las últimas migajas de las manos y vuelven a estirarlas con una desesperación que no tiene perdón de Dios. No hay que olvidarlos de nuevo. No hay que olvidarse nunca de lo que te enseñaron de chico en el colegio: aunque hables el idioma de los ángeles, si no tienes amor, tus palabras resonarán como címbalos. Aunque tengas el don de la profecía y entiendas todos los misterios y poseas toda la riqueza y todo el conocimiento. Aunque tengas toda la fe y muevas todas las montañas. Si no tienes amor, no eres ni mierda. (Es palabra de Dios. Te alabamos, señor).

miércoles, 22 de agosto de 2007

Apuntes sobre la tragedia: un breve balance

La tragedia que ha ocurrido en el sur chico del Perú nos ha revelado en toda su crudeza la presencia infame de la pobreza. Ciertamente, somos un país pobre, subdesarrollado y neocolonizado. Y todos los peruanos lo sabemos. Pero -al márgen de unos cuantos intelectuales- ¿Acaso alguna vez nos hemos preguntado porqué lo somos? Quizá muchos lo hayan hecho y las respuestas pudieran haber sido muchas, muchísimas, sin embargo, de nada ha servido porque seguimos conviviendo con esta lacra que nos denigra como seres humanos.

Los damnificados de Cañete. Ica, Chincha, Pisco y otras localidades costeras y serranas han sido en su abrumadora mayoría pobres. Un 95 por ciento para ser más exactos. Y la tragedia de estos pobres es ser castigados doblemente: por la naturaleza y por sus autoridades.

La pobreza nunca está acompañada de la equidad social. Todo lo contrario. Por eso no es de extrañar que la ayuda solidaria de muchos peruanos y gobiernos internacionales, aun no lleguen a la mayoría de estos necesitados, que se encuentran dispersos en las periferias de las ciudades. Y sus autoridades esperan que estos pobres damnificados vayan donde ellos estan, porque éstos no pueden ir adonde ellos se encuentran. Es lo que dijo el Presidente: "El Estado no puede ir de casita en casita..." Claro, no está en campaña electoral!

De otro lado, siempre machaconamente se habla -sobre todo en épocas de desastres naturales- que estamos en una zona sísmica pero nunca se hace nada. ¿Por falta de recursos? ¿Falta de directrices políticas ? ¿Falta de técnicos e investigadores geo-físicos? ¡Vaya uno a saber!

Y cuando han ocurrido los desastres ¿Que se hace? Todos hemos sido testigos de que el Presidente -en el caso concreto de este sismo- minimizó en un primer momento la magnitud de la tragedia. ¿Desinformación? ¿Desidia? Luego, en una acto de "heroico esfuerzo", se desplazó a la zona de la tragedia para centralizar las acciones de rescate y empadronamiento de víctimas; sin embargo, la eficiencia no ha venido de la mano con la presencia del jefe de Estado. Y esto ¿Porqué? Porque simplemente la jefatura del ente creado para las situaciones de desastre - el Instituto Nacional de Defensa Civil- no estuvo cumpliendo cabalmente sus funciones. Y por ello, muchos recuerdan al general Luis Palomino (jefe del INDECI) coordinando en Lima la ayuda para los damnificados, cuando su labor central tenía que estar en el mismo lugar de la catástrofe.


Nuestro Presidente, en un momento de exasperación, preguntó que dónde se encontraban las organizaciones no-gubernamentales de ayuda asistencial (ONGs) y, no obstante, se dio el lujo de ser grosero con una de ellas. Concretamente con la ONG catalana K-9 que habían viajado 14,000 kilometros para dar socorro a las víctimas de la catástrofe, pagándose incluso ellos mismos sus pasajes aéreos y sus gastos de estadía. Por esta situación a estos rescatistas, que no pedían sino un mínimo de seguridad para sus vidas (recuérdese que se encontraron en medio de un tiroteo cuando realizaban acciones de rescate) no les quedó mas remedio que retornar a sus lugares de orígen. Preguntamos: ¿Porque esa exacerbación verbal contra los rescatistas voluntarios y los medios periodísticos extranjeros? ¿Sera acaso porque estas ONGs europeas no son dóciles y no se dejan manejar al antojo de cualquier improvisada autoridad? Y preguntamos asimismo: ¿Porqué esa retahila de elogios para con el gobernante Uribe? ¿Será acaso porque éste es cercano colaborador de Bush? ¿O porque aplica una política ultra liberalista en Colombia?

Otro hecho que nos ha llamado la atención pero que es comprensible -si es que nos ponemos del lado de esa prensa servil y palaciega- es que casi nadie ha mencionado la ayuda de los países hermanos de Cuba y Venezuela. Cuando a este último país se le ha mencionado, solo ha sido para poner en labios de los medios noticiosos, una supuesta campaña propagandística de Hugo Chávez y Ollanta Humala. Pero, el montaje ha sido tan burdo y caricaturesco, que se diluyó como pompa de jabón al cabo de 24 horas de vida. Y de Cuba, que ha contribuído con dos hospitales de campaña, medicinas y médicos altamente capacitados en situaciones de riesgos y catástrofes, nadie ha dicho ni dice nada. Cosas de la vida.

domingo, 19 de agosto de 2007

El otro "terremoto" en ciernes

Pocas veces miro television, pero en estos días no puedo dejar de ver las noticias sobre el terremoto que asoló el denominado "sur chico" del Perú. Y lo que veo me deja con una sensación de fastidio, desagrado y pesimismo por la forma como el gobierno viene conduciendo las acciones de rescate y la repartición de la ayuda solidaria que siguen llegando desde todos los confines, dentro y fuera del país.

Tal como van las cosas lo que se evidencia es una total incapacidad de respuesta logística por parte del Estado frente a la dramática situación de miles de damnificados por el terremoto. Y la desesperación, la angustia y las necesidades primarias que no se satisfacen como debiera ser -fundamentamente el hambre, la sed y el frío invernal- estan empujando a la irracionalidad de muchos damnificados, quienes se ven impelidos al saqueo de los bienes básicos de existencia.

Sabemos que las vías de comunicación terrestre estan cortadas y por eso se hace difícil movilizar los recursos asistenciales. Sin embargo, las vías áereas y marítimas estan expeditas y solo la negligencia de algunos funcionarios son los que retardan que esta ayuda se efectivice y llegue pronto a sus destinatarios finales. Aunque también sospechamos que no tenemos los medios suficientes para atender la crecientes necesidades ya que solamente se observa el tráfico de unos cuantos aviones y helicópteros militares en mal estado, que hasta se caen de viejos, y que piden a gritos un mantenimiento adecuado.

Traigo a colación una cita muy oportuna del lúcido colummnista del diario "Expreso" don Marcos Ibaceta Merino quien dice: "¿Por qué demonios no tenemos una flota aérea de reserva capaz de resolver nuestros problemas frente a cualquier catástrofe? Ahora sí estoy de acuerdo con todos aquellos que cuestionaron la entrega de nuestro espacio aéreo, y denunciaron la renuncia del Estado a fortalecer nuestra capacidad operativa por aire, mar y tierra. El ridículo mayor se produce ante la llegada de la ayuda extranjera a Pisco, en cuyo aeropuerto no hay capacidad técnica de descarga rápida por cuya razón la Fuerza Aérea del Perú ha tenido que pedir ayuda al sector privado".

Es evidente que el Estado Peruano no está preparado para una situación de emergencia como la que se está viviendo en las provincias devastadas de Ica. Y esto se da no tanto por la incapacidad de sus autoridades, sino porque hace mucho tiempo las clases de poder renunciaron a erigir un Estado fuerte y previsor, dejando todo a las fuerzas negras de la economía neoliberalista, que busca más bien disminuir la presencia de este Estado y solo reforzar su aparato represivo.

Por ello no es de extrañar que frente a las crecientes acciones de saqueo de pobladores desesperados, el gobierno priorize las medidas de "seguridad" -para lo cual si están óptimamente capacitados- reforzando la presencia de fuerzas policiales y militares y posiblemente acompañadas de medidas coercitivas que inhiben los derechos humanos como son los "toque de queda", "ley marcial" o "estado de sitio". Esperemos que no se llegue tan lejos, caso contrario estaría produciendose otro "terremoto" ya no de naturaleza telúrica, sino social de insospechadas repercusiones políticas.

sábado, 18 de agosto de 2007

La solidaridad de EEUU: ¡¡¡100 mil dólares!!!

Revisando los diarios on line me encuentro con esta noticia que me supo a cruel broma en estos momentos de dolor y angustia que sufren las víctimas del terrible desastre natural. Pero no es ningún chiste, es la pura verdad.

En efecto, el gobierno del señor Bush ha desembolsado 100 mil dolares a los afectados por el terremoto en el Perú a través de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y la Agencia para la Asistencia de Desastres en el Exterior. Esta es la información que se difunde a través de todos los cables noticiosos.

El país más rico del mundo; el país que tiene a Bill Gates dueño de una fortuna que bordea los 40,000 millones de dolares; el país que destina en la Guerra de Irak, aproximadamente 200 millones de dolares en un solo día; nos ha donado: ¡¡¡100 mil dolares!!! ¡Vaya: Toda una fortuna!

Suena inaudito, pero es la verdad. El señor Bush destina miles y miles de millones de dólares en su guerra imperialista en el oriente próximo (que ya va costando mas de un millón de muertos iraquíes y millones de hogares desplazados) y, sin embargo, a un país pobre y devastado por las fuerzas de la naturaleza solo le brinda una propina, más para aliviar el cargo de conciencia que pesa sobre sus espaldas, que para satisfacer las necesidades de algunas cuantas familias afectadas por el sismo. Porque no hay que perder de vista que los terremotos y otras catástrofes naturales que están ocurriendo ultimamente, no nos llegan simplemente por que Dios nos esta castigando por todos nuestros "pecados", sino porque las grandes potencias del orbe -principalmente EEUU- están destruyendo al planeta con tanto material atómico concentrado en sus manos, con tanta basura radiactiva que la desechan en nuestros mares y por la insaciable voracidad de los recursos energéticos que obligan a perforar nuestros suelos y subsuelos, a diestra y siniestra, en búsqueda de más fuentes de petróleo y gas. Esa es una verdad incuestionable que nos debe obligar a tomar conciencia de nuestra realidad social y también del daño ecológico que le están haciendo a nuestra madre naturaleza. La desgracia que hoy sufren nuestros hermanos de Ica, Pisco, Chincha y otras localidades, deben motivarnos a un profunda reflexión sobre lo que está sucediendo en nuestro entorno geográfico y ecológico. Y quizá, la manera más efectiva de encauzar esta reflexión sea mediante la "blogósfera". Por el momento les invito a visitar el blog BohemiaMar que tiene algunos aportes de cuales son las principales causas de los terremotos.

jueves, 16 de agosto de 2007

Cuando el dolor llega a nuestros corazones...

Antes de encender el computador tenía claro lo que quería escribir. Y ahora que estoy frente al monitor encendido no se por donde empezar. Las ideas se me agolpan en la cabeza y solo quiero dejarme arrastrar por el suave murmullo del golpeteo de estas teclas.

A veces es inevitable que el dolor nos agarre por sorpresa. Cuando estamos con un ser querido que sabemos que se le acerca el fin de sus días, nos vamos preparando emocionalmente de tal modo que, cuando llega su "hora", el dolor "duele" menos. Pero, ¿Que hacer cuando nos toma desprevenidos? ¿Como afrontar el dolor cuando de un momento a otro perdemos a nuestros seres queridos? ¿Como afrontar el pesar de ver el esfuerzo de toda una vida tirado por los suelos? No es fácil responder estas preguntas porque cada uno de nosotros maneja su dolor de manera muy particular y muy íntima. Sin embargo, una tragedia como la que ha sucedido en nuestras ciudades costeras, al sur de Lima, nos tiene que doler a todos los peruanos.

No quiero detenerme en el número de víctimas que siguen creciendo, tampoco en los daños materiales porque eso es oficio del periodismo y de los medios televisivos. Quiero, por el contrario, escribir algunas letras con relación a la solidaridad y a la generosidad de mucha gente, que se están haciendo presente con su aporte voluntario y desinteresado a fin de mitigar en algo la carencia de los medios perdidos. La grandeza de las personas se miden en acciones concretas cuando la tragedia toca las puertas. Ahí están los ejemplos de la señora Michelle Bachelet, Presidenta de Chile, que en un momento de dolor como el que vive todo el pueblo peruano, no puede dejar de expresar su pesar y su solidaridad disponiendo la ayuda material y humana que sea necesaria, aun cuando pesan fricciones entre ambos gobiernos, por cuestiones limítrofes. También están presentes los demás mandatarios de América Latina como Brasil, Bolivia, Paraguay, Méjico, Venezuela y siguen sumando, que están enviando ayuda tanto en recursos materiales como humanos. Pero también estan presentes los miles y miles de seres anónimos, dentro y fuera del país, que ya están haciendo sus aportes solidarios y monetarios en las cuentas de organizaciones de ayuda humanitaria.

Quiero expresar públicamente mi agradecimiento imperecedero a todos mis amigos de la red y de mi blog por sus alentadores mensajes de solidaridad, fe y esperanza para con mi pueblo. Me dicen que la grandeza del espíritu del Perú es mucho más grande que su dolor. Y yo también así lo creo. Y porque creo que el dolor nos hermana, quiero decirles a mis amigos chilenos que no importa cuanto nos enemisten las cuestiones de fronteras (territoriales y marítimas) ellos siempre estarán en mis recuerdos. No solo por el noble gesto de su Presidenta -a quien admiro mucho como mujer y como estadista- sino por todo lo que me dio Chile, cuando arribé a sus tierras, ya hace una década. Este hermoso país me acogió como mi segunda patria y por ello, los chilenos y chilenas, siempre estarán en mis pensamientos y en mi corazón.

viernes, 10 de agosto de 2007

El "genocidio" a fuego lento de los indígenas argentinos



Ayer se celebró un aniversario más del "Día Internacional de los Pueblos Indigenas" y, como siempre, pasó desapercibido en la prensa latinoamericana. Sin embargo, para las poblaciones nativas de Argentina, este día sirvió para exteriorizar su protesta enérgica contra las autoridades por algo que ellos consideran el "lento genocidio" de sus integrantes, debido a una reciente ola de muertes por desnutrición aguda.

En efecto, en las últimas semanas 11 personas de la población toba han muerto por la falta crónica de alimentos en la región del Chaco, ubicada al nor-este de este país, gran exportador mundial de carnes y granos. Pero, según los pobladores indígenas, este problema de la desnutrición crónica se extiende también a otras regiones del territorio argentino, hecho que se ve corroborado con las informaciones que manejan algunas agencias no gubernamentales (ONGs) que trabajan en las comunidades aborígenes.

Rolando Nuñez del Centro de Estudios "Nelson Mandela" -una organización de derechos humanos- ha denunciado y seguido muy de cerca las dificultades que enfrentan cotidianamente los más de 50 mil indígenas que viven en la región chaqueña. "Están cautivos en un verdadero desastre humanitario. Presentan los peores indicadores sociales, económicos, sanitarios y educativos de Argentina. Y como eso no parece cambiar, nosotros sostenemos que estamos ante un genocidio étnico. A algunos les puede resultar exagerado, pero los que conocemos bien esta realidad no podemos decir otra cosa", afirma con una consternación propia del investigador "in situ".

Este mismo investigador de campo señala que el problema de la tierra es fundamental para entender la pobreza y la desnutrición de los pobladores aborígenes. "Las comunidades fueron desplazadas de sus territorios, de sus bosques, al ampliarse las fronteras de la actividad agropecuaria, lo que las dejó sin sustento y medicinas naturales".



Por otro lado, la dirigente indígena Lucía Rosa Molloja de la comunidad kolla expresa: "Siento indignación, bronca, incapacidad de no poder hacer algo. No tenemos el poder para vencer esto". Sustenta que el reclamo urgente de los aborígenes se resume en una mayor disponibilidad de las tierras -que les fueron arrebatadas hace mucho tiempo- y también de un mejor acceso al trabajo, a la educación y a la salud. Asimismo, Rogelio Guanuco de la Asociación Indígena de la República Argentina (AIRA) añade: "Queremos que entiendan que existimos y queremos integrarnos a la sociedad para tener los mismos derechos que cualquier ser humano. No pedimos privilegios, sino un reconocimiento como el que lograron comunidades de otras partes del mundo que se establecieron en Argentina. Ellos tienen sus bibliotecas, sus hospitales, sus escuelas, sus lenguas, ¿y por qué no, nosotros, que somos de esta tierra?". He ahí una gran verdad que debe motivarnos a una profunda reflexión, pues los problemas de los nativos argentinos, son los mismos que padecen las demás poblaciones nativas de América Latina y que se fundan basicamente en la tremenda desigualdad en el acceso al medio natural de trabajo: la tierra.
(Fuente: BBC Mundo)

lunes, 6 de agosto de 2007

Alturas de Macchu Picchu - Los jaivas





ALTURAS DE MACCHU PICCHU

PABLO NERUDA

(Continuación...)

VIII

Sube conmigo, amor americano.

Besa conmigo las piedras secretas.
La plata torrencial del Urubamba
hace volar el polen a su copa amarilla.

Vuela el vacío de la enredadera,
la planta pétrea, la guirnalda dura
sobre el silencio del cajón serrano.
Ven, minúscula vida, entre las alas
de la tierra, mientras -cristal y frío, aire golpeado-
apartando esmeraldas combatidas,
oh agua salvaje, bajas de la nieve.

Amor, amor, hasta la noche abrupta,
desde el sonoro pedernal andino,
hacia la aurora de rodillas rojas,
contempla el hijo ciego de la nieve.

Oh, Wilkamayu de sonoros hilos,
cuando rompes tus truenos lineales
en blanca espuma, como herida nieve,
cuando tu vendaval acantilado
canta y castiga despertando al cielo,
qué idioma traes a la oreja apenas
desarraigada de tu espuma andina?

Quién apresó el relámpago del frío
y lo dejó en la altura encadenado,
repartido en sus lágrimas glaciales,
sacudido en sus rápidas espadas,
golpeando sus estambres aguerridos,
conducido en su cama de guerrero,
sobresaltado en su final de roca?

Qué dicen tus destellos acosados?
Tu secreto relámpago rebelde
antes viajó poblado de palabras?
Quién va rompiendo sílabas heladas,
idiomas negros, estandartes de oro,
bocas profundas, gritos sometidos,
en tus delgadas aguas arteriales?

Quién va cortando párpados florales
que vienen a mirar desde la tierra?
Quién precipita los racimos muertos
que bajan en tus manos de cascada
a desgranar su noche desgranada
en el carbón de la geología?

Quién despeña la rama de los vínculos?
Quién otra vez sepulta los adioses?

Amor, amor, no toques la frontera,
ni adores la cabeza sumergida:
deja que el tiempo cumpla su estatura
en su salón de manantiales rotos,
y, entre el agua veloz y las murallas,
recoge el aire del desfiladero,
las paralelas láminas del viento,
el canal ciego de las cordilleras,
el áspero saludo del rocío,
y sube, flor a flor, por la espesura,
pisando la serpiente despeñada.

En la escarpada zona, piedra y bosque,
polvo de estrellas verdes, selva clara,
Mantur estalla como un lago vivo
o como un nuevo piso del silencio.

Ven a mi propio ser, al alba mía,
hasta las soledades coronadas.
El reino muerto vive todavía.

Y en el Reloj la sombra sanguinaria
del cóndor cruza como una nave negra.


IX

Águila sideral, viña de bruma.
Bastión perdido, cimitarra ciega.
Cinturón estrellado, pan solemne.
Escala torrencial, párpado inmenso.
Túnica triangular, polen de piedra.
Lámpara de granito, pan de piedra.
Serpiente mineral, rosa de piedra.
Nave enterrada, manantial de piedra.
Caballo de la luna, luz de piedra.
Escuadra equinoccial, vapor de piedra.
Geometría final, libro de piedra.
Témpano entre las ráfagas labrado.
Madrépora del tiempo sumergido.
Muralla por los dedos suavizada.
Techumbre por las plumas combatida.
Ramos de espejo, bases de tormenta.
Tronos volcados por la enredadera.
Régimen de la garra encarnizada.
Vendaval sostenido en la vertiente.
Inmóvil catarata de turquesa.
Campana patriarcal de los dormidos.
Argolla de las nieves dominadas.
Hierro acostado sobre sus estatuas.
Inaccesible temporal cerrado.
Manos de puma, roca sanguinaria.
Torre sombrera, discusión de nieve.
Noche elevada en dedos y raíces.
Ventana de las nieblas, paloma endurecida.
Planta nocturna, estatua de los truenos.
Cordillera esencial, techo marino.
Arquitectura de águilas perdidas.
Cuerda del cielo, abeja de la altura.
Nivel sangriento, estrella construida.
Burbuja mineral, luna de cuarzo.
Serpiente andina, frente de amaranto.
Cúpula del silencio, patria pura.
Novia del mar, árbol de catedrales.
Ramo de sal, cerezo de alas negras.
Dentadura nevada, trueno frío.
Luna arañada, piedra amenazante.
Cabellera del frío, acción del aire.
Volcán de manos, catarata oscura.
Ola de plata, dirección del tiempo.


X

Piedra en la piedra, el hombre, dónde estuvo?
Aire en el aire, el hombre, dónde estuvo?
Tiempo en el tiempo, el hombre, dónde estuvo?
Fuiste también el pedacito roto
de hombre inconcluso, de águila vacía
que por las calles de hoy, que por las huellas,
que por las hojas del otoño muerto
va machacando el alma hasta la tumba?
La pobre mano, el pie, la pobre vida...
Los días de la luz deshilacliada
en ti, como la lluvia
sobre las banderillas de la fiesta,
dieron pétalo a pétalo de su alimento oscuro
en la boca vacía?

Hambre, coral del hombre,
hambre, planta secreta, raíz de los leñadores,
hambre, subió tu raya de arrecife
hasta estas altas torres desprendidas?

Yo te interrogo, sal de los caminos,
muéstrame la cuchara, déjame, arquitectura,
roer con un palito los estambres de piedra,
subir todos los escalones del aire hasta el vacío,
rascar la entraña hasta tocar el hombre.

Macchu Picchu, pusiste
piedra en la piedra, y en la base, harapos?
Carbón sobre carbón, y en el fondo la lágrima?
Fuego en el oro, y en él, temblando el rojo
goterón de la sangre?
Devuélveme el esclavo que enterraste!
Sacude de las tierras el pan duro
del miserable, muéstrame los vestidos
del siervo y su ventana.
Dime cómo durmió cuando vivía.
Dime si fue su sueño
ronco, entreabierto, como un hoyo negro
hecho por la fatiga sobre el muro.
El muro, el muro! Si sobre su sueño
gravitó cada piso de piedra, y si cayó bajo ella
como bajo una luna, con el sueño!
Antigua América, novia sumergida,
también tus dedos,
al salir de la selva hacia el alto vacío de los dioses,
bajo los estandartes nupciales de la luz y el decoro,
mezclándose al trueno de los tambores y de las lanzas,
también, también tus dedos,
los que la rosa abstracta y la línea del frío, los
que el pecho sangriento del nuevo cereal trasladaron
hasta la tela de materia radiante, hasta las duras cavidades,
también, también, América enterrada, guardaste en lo más bajo,
en el amargo intestino, como un águila, el hambre?




XI

A través del confuso esplendor,
a través de la noche de piedra, déjame hundir la mano
y deja que en mí palpite, como un ave mil años prisionera,
el viejo corazón del olvidado!
Déjame olvidar hoy esta dicha, que es más ancha que el mar,
porque el hombre es más ancho que el mar y que sus islas,
y hay y que caer en él como en un pozo para salir del fondo
con un ramo de agua secreta y de verdades sumergidas.
Déjame olvidar, ancha piedra, ¡a proporción poderosa,
la trascendente medida, las piedras del panal,
y de la escuadra déjame hoy resbalar
la mano sobre la hipotenusa de áspera sangre y cilicio.
Cuando, como una herradura de élitros rojos, el cóndor furibundo
me golpea las sienes en el orden del vuelo
y el huracán de plumas carniceras barre el polvo sombrío
de las escalinatas diagonales, no veo a la bestia veloz,
no veo el ciego ciclo de sus garras,
veo el antiguo ser, servidor, el dormido
en los campos, veo un cuerpo, mil cuerpos, un hombre, mil mujeres,
bajo la racha negra, negros de lluvia y noche,
con la piedra pesada de la estatua:
Juan Cortapiedras, hijo de Wiracocha,
Juan Comefrío, hijo de estrella verde,
Juan Piesdescalzos, nieto de la turquesa,
sube a nacer conmigo, hermano.


XII

Sube a nacer conmigo, hermano.

Dame la mano desde la profunda
zona de tu dolor diseminado.
No volverás del fondo de las rocas.
No volverás del tiempo subterráneo.
No volverá tu voz endurecida.
No volverán tus ojos taladrados.
Mírame desde el fondo de la tierra,
labrador, tejedor, pastor callado:
domador de guanacos tutelares:
albañil del andamio desafiado:
aguador de las lágrimas andinas:
joyero de los dedos machacados:
agricultor temblando en la semilla:
alfarero en tu greda derramado:
traed a la copa de esta nueva vida
vuestros viejos dolores enterrados.
Mostradme vuestra sangre y vuestro surco,
decidme: aquí fui castigado,
porque la joya no brilló o la tierra
no entregó a tiempo la piedra o el grano:
señaladme la piedra en que caísteis
y la madera en que os crucificaron,
encendedme los viejos pedernales,
las viejas lámparas, los látigos pegados
a través de los siglos en las llagas
y las hachas de brillo ensangrentado.
Yo vengo a hablar por vuestra boca muerta.
A través de la tierra juntad todos
los silenciosos labios derramados
y desde el fondo habladme toda esta larga noche
como si yo estuviera con vosotros anclado,
contadme todo, cadena a cadena,
eslabón a eslabón, y paso a paso,
afilad los cuchillos que guardasteis,
ponedlos en mi pecho y en mi mano,
como un río de rayos amarillos,
como un río de tigres enterrados,
y dejadme llorar, horas, días, años,
edades ciegas, siglos estelares.
Dadme el silencio, el agua, la esperanza.

Dadme la lucha, el hierro, los volcanes.

Apegadme los cuerpos como imanes.

Acudid a mis venas y a mi boca.

Hablad por mis palabras y mi sangre.

(Del Canto General, 1950)

sábado, 4 de agosto de 2007

De como el dinero puede comprar las voluntades...

He estado pensando como el poder del dinero puede corromper la voluntad de las personas a tal punto de que toda una vida de éxitos y laureles, obtenido con mucho sacrificio, se lo tira por la borda en un segundo quedando solamente en las manos, un fajo de billetes sucios, y el vacío de una dignidad perdida con el cual se tiene que seguir "viviendo" toda la vida. El caso de los deportistas desertores de Cuba -seguros candidatos a las preseas doradas- en estos juegos panamericanos de Río de Janeiro, es la prueba palmaria de lo que afirmamos.

El dinero -"la caca del diablo" como algún cura medieval dijo- es un instrumento poderoso para comprar las conciencias de los hombres. En una sociedad dominada por el consumismo y por las leyes oscuras del mercado, es el único objetivo que pareciera darnos la llave de la felicidad y como locos nos abocamos a obtenerla, cueste lo que nos cueste. Atrás van quedando los principios rectores de la solidaridad, la justicia, la igualdad, la honestidad, etc., propios de un sistema equitativo, que se rige dentro de los cánones de una democracia participativa y popular. Como contraparte, lo que presenciamos el día de hoy es la omnipresencia y omnipotencia de una política neoliberal que propicia el individualismo de los seres humanos. Dentro de este sistema "vales lo que tienes", o sea, mientras más riquezas poseas, eres mucho más entre esa "sumatoria de individuos" inconexos. Los demás hombres, es decir, aquellos que no poseen el dinero suficiente para estar en la cúspide de la pirámide social, solo son considerados como simples "recursos", "mano de obra" o "materia prima" para la producción de bienes materiales y de servicios. De ahí que hay mucha verdad cuando se dice que lo que persigue este sistema económico-social ,tan grato a nuestras clases políticas de mi querido Perú, es "hacer más ricos a los más ricos y más pobres a los más pobres".

Pero también observamos que hay vientos favorables para un cambio gradual en los recientes gobiernos latinoamericanos. Hay voces de altos dignatarios que se oponen a las fuerzas nefastas de esa política neo-imperial, incapaz de entender el sufrimiento, las emociones y los deseos de los hombres libres. Observamos como desde los inicios de este milenio, países como Argentina, Brasil, Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua, oyendo las voces de sus pueblos, empiezan a enmendar rumbos de cara a sus gentes. Esto desde luego no hubiera sido posible sin el accionar de vigorosos movimientos sociales que pugnan por reivindicar sus derechos. La lucha de hoy en todo el continente es contra este sistema neoliberal, depauperante, que trata de imponer tratados de libre comercio, que trata de exonerar el pago de impuestos de las grandes transnacionales, que trata de modificar las constituciones políticas de acuerdo a los intereses voraces de las multinacionales. Y todo ello a costa de un mayor sacrificio de las clases productoras, a costa de un mayor desequilibro ambiental que nos esta llevando a las catástrofes naturales que vemos en estos días. A costa de una mayor desigualdad social y una tremenda injusticia contra los seres más sensibles -los niños- como bien lo señaló el último informe de la CEPAL. Pero, felizmente, estamos en una época de cambios. O mejor aun, como bien lo señaló el Presidente ecuatoriano Rafael Correa: "...estamos en un cambio de época..."

miércoles, 1 de agosto de 2007

Niños sin agua en América Latina


Más de un tercio de los niños y jóvenes de Latinoamérica carecen de acceso o tienen un acceso inadecuado al agua potable en sus hogares, según un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

El organismo de las Naciones Unidas asegura que un 35,3 por ciento de los niños y jóvenes de la región sufre esta carencia, porcentaje que se reduce al 27,4 en el caso de los adultos. Según la CEPAL, el acceso inadecuado al agua potable afecta en América Latina a cerca de 21 millones de niños menores de cinco años, cuyas consecuencias para la salud son bastante dramáticas: "Cada año podrían evitarse miles de casos de mortalidad infantil y malnutrición si hubiese una mejora substancial en el acceso al agua potable", afirma el estudio.

Los más afectados son los niños de los asentamientos marginales de las ciudades y también de las poblaciones rurales que no cuentan con un adecuado saneamiento y potabilización del agua. Un anterior informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) señalaba, asimismo, que en el mundo más de mil millones de personas no tienen acceso al agua potable y, anualmente, casi dos millones de niños mueren como consecuencia de enfermedades ocasionadas por agua contaminada. Además, el informe sostiene que las causas de la crisis del agua radican en la pobreza, la desigualdad y las relaciones de poder sin equilibrios, y no tanto en la escasez del líquido vital.

El mexicano Ricardo Fuentes, uno de los autores del informe del PNUD titulado "Más allá de la escasez: poder, pobreza y la crisis mundial del agua", puntualizó que el tema no puede esperar. "Lo que nosotros estamos sugiriendo a los gobiernos y la comunidad internacional son cuatro puntos fundamentales: que el acceso al agua sea un derecho humano, que se promuevan estrategias nacionales en las que saneamiento y acceso tengan un rol primordial, que se aumente la ayuda internacional de los países donantes al sector y que se implemente un plan de acción global para coordinar esfuerzos", explicó Fuentes.

(Fuente: BBC Mundo)